Este fin de semana no hay quien duerma
Este fin de semana son las fiestas que más cerca tengo de casa, las fiestas de Campuzano. La mayoría de la gente se alegra cuando son este tipo de celebraciones, pero yo no soy así, a mí me molestan. La organización está realmente bien, de eso no hay queja porque para ser unas fiestas muy pequeñas siempre hay un gran ambiente. El problema llega cuando uno no quiere estar más tiempo en la verbena y quiere irse a dormir. Mi ventana da junto al patio que está entre dos edificios, lo que hace que haya efecto rebote y suene aún más alto. Este fin de semana si quiero descansar me tendré que ir de casa porque el volumen de la música no lo paran ni los tapones para los oídos.